Sharkey Ward, el piloto inglés que el 1º de junio de 1982 derribó a un avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea Argentina y provocó la muerte de toda la tripulación, falleció este miércoles en Inglaterra.
La tripulación del Hércules era liderada por el capitán Rubén Martel, quien tenía 35 años y era de Reconquista, en el norte santafesino, y cuyo hijo Ezequiel fue protagonista de una increíble historia al encontrar restos del avión más de tres décadas después en los pastizales de la isla de Borbón, a unos cinco kilómetros al norte de la isla Gran Malvina.