La mujer se comunicaba a través de chats. Pensó que era una fantasía de su cliente, pero en una sesión constató las violaciones. Quedó detenido en Salta.
Un aberrante hecho que conmueve a la localidad salteña de Tartagal se conoció en las últimas horas. Un gendarme contrató a una mujer para que le envíe contenido erótico y le pidió que lo mirara mientras él violaba a su hijastra de 7 años.
Todo ocurrió hace un tiempo atrás, pero gracias a la denunciante que desde Buenos Aires logró contactar a la gendarmería de Salta, este sábado lograron detener al violador. La madre de la víctima también fue arrestada luego de que se supo que intentó encubrir a su pareja.
El acusado, identificado solo como T.V. -para proteger a la menor- es un gendarme de 35 años, estudiante de abogacía, oriundo de Buenos Aires, pero que actualmente reside en Tartagal y trabajaba en el Escuadrón 54 de Aguaray.
El relato de la mujer es escalofriante. Ella es de Buenos Aires y toda la conversación se dio por medio de chats. En principio, la charla con el sujeto, a quien le vendió contenido erótico por $8.000, transcurría normalmente.
Sin embargo, en determinado momento el acusado le confesó que había abusado en reiteradas ocasiones de su hijastra de 7 años.
El hombre le contó los aberrantes actos a los que la había sometido a la niña en detalle, y le pidió hacer una videollamada para que la mujer realice su contenido mientras él abusaba de la nena.
En primer lugar, la denunciante accedió, según dijo, creyendo que solo se trataba de la imaginación de su cliente, hasta que empezó a darse cuenta de que le estaba diciendo la verdad. Enseguida buscó datos del violador e intentó que le envíe una foto de su cara, pero no lo logró.